CUATRO ENEMIGOS DE LA AMISTAD
En este mes que se habla tanto de la amistad, fui a una reunión donde se habló de algo muy interesante , y son las conductas que tenemos y que hacen que la amistad se destruya, me pareció en un principio que eran cuatro conductas fuertes y que quizá ya hemos vencido, pero déjenme decirles que después de reflexionar, me parece que algunas veces aparecen en nuestro diario vivir, la primera de ellas es:
EL CHISME: Mis amadas las palabras que salen de nuestra boca nunca vuelven a entrar, como decía mi Pastor, por cada chisme ponga una plumita en una bolsita, luego suba a un vehículo y destape la bolsita y deje ir las plumitas cuando este vacía, regrese y trate de recogerlas, y verá que es imposible, así son los chismes, una vez que hemos abierto la boquita, nada se puede hacer para rectificar y este es una de las conductas que mas destruye amistades, en Prov. 16:28 dice “El hombre perverso, levanta contienda Y EL CHISMOSO APARTA LOS MEJORES AMIGOS”.
Si queremos conservar a nuestros amigos, cuando estén ausentes, mejor defiéndalos en lugar de criticarlos, o hable solamente cuando sus palabras vayan a edificar a otros.
LA ENVIDIA: En el diccionario la define como la tristeza airada o disgusto por el bien ajeno, también podría ser el malestar que se siente por la estimación que le tienen a otros, en Job 5:2 “ Es cierto que al necio lo mata la ira, Y AL CODICIOSO LO CONSUME LA ENVIDIA”.
No codiciemos lo que tiene otra persona, conformémonos con lo que tenemos, que no nos disguste ver la prosperidad de nuestros amigos, más edificante es alegrarnos juntamente con ellos de esa prosperidad y aprender de ellos, en prov. 14:30b, nos dice que la envidia es carcoma de los huesos, o sea que trae una enfermedad física, tratemos de estar sanos tanto física como espiritualmente. Y conservemos a esos preciosos amigos.
HIPOCRESIA: Según el diccionario es “Fingimiento de cualidades o sentimientos contrarios a los que sentimos, y especialmente falsa apariencia de virtud o devoción” En una palabra somos buenos actores aparentando ser o sentir lo que no somos, se me viene a la mente una caricatura que salía en un periódico en época de mi juventud y se llamaba “El doctor merengue”, este personaje siempre estaba saludando y diciendo cosas amables y en otro cuadro aparecía una nubecita en la cabeza donde decía todo lo contrario, En Mateo 23:27-28 dice” ay de vosotros Escribas y Fariseos HIPOCRITAS porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera a la verdad se muestran hermosos, mas por dentro están llenos de huesos muertos y de toda inmundicia” sabe una cosa, si no siente nada mejor no hable, así se evitará de que mas tarde le quede esa sensación fea de que dijo una mentira a un amigo, y que tarde o temprano éste lo sepa y lo pierda para siempre.
ODIO: Este es un sentimiento de aversión o rechazo muy intenso e incontrolable hacia algo o alguien.
Cuando alguien practica alguna de las conductas ya mencionadas, es casi seguro que surja el odio, mis queridos lectores si ustedes creen que están sintiendo ese rechazo intenso y que cada día crece con mas intensidad, por favor pare, reflexione, hay una salida para arrancarse ese sentimiento, y es EL PERDON, decida perdonar, aunque usted piense que no se lo merece la otra persona, quizá tenga razón, pero perdonar es una de las formas de liberarnos de esa amargura, de esa ira, de esa cólera, de ese deseo de venganza que mantenemos, me podrá decir “si pero yo no puedo “ yo le aseguro que si puede, visualice a la persona que le hizo daño y ponga adelante la figura de nuestro Señor Jesucristo y diga “ yo por mis fuerzas no te puedo perdonar, pero con el poder del Señor Jesucristo te perdono” , hágalo y verá como se siente de liberado, descansado y se irá toda amargura de su corazón y toda enfermedad en su cuerpo.
Prov. 10:12 dice “El odio despierta rencillas, Pero el amor cubrirá todas las faltas” y por último si quiere conservar a sus amigos eliminemos estas conductas que solo nos llevarán a quedarnos solos, y recordemos en Prov. 17:9 “el que cubre la falta busca amistad, más el que la divulga, aparta el amigo”.
Mary de De León